Mundo de sombras y de oscuridad, mundo de desventajas para los que tenéis la suerte de ver este mundo de colores, aprendiendo conforme estáis viendo y formáis vuestro mundo firme y seguro.
Caminantes de unos caminos irreales dentro de vuestras mentes, caminos inimaginables, sin color, sin bellezas y sin fin.
Fe no valorada formando sus creencias por sus oídos y no por lo que ve. Luz interior que les lleva a unas creencias superiores formada por su intuición, llave maestra que tiene muy poco margen de error.
Déjame por unas horas o por un día ser tu lazarillo y en primer lugar quiero prestarte mis ojos para que tu mismo compruebes la belleza que te rodea y también la fealdad.
Cuando empezó a ver lo primero fue comprobar como era su familia, valorarla no por sus voces o cuando empleaba su tacto, mas bien verla y comprobar sus gestos porque la palabra tiene mucha importancia pero los gestos son sentimientos sólidos del corazón. Comprobó y vio donde paso su niñez, todo para el era un mundo nuevo porque en sus oídos escuchaba a sus amigos de la infancia correr y jugar, dejándolo muchas veces solo. Valoró cada una de las cosas que le rodeaban, mas aun la naturaleza real y no la que él había creado dentro de su mundo de sombras.
Cada árbol, rio, montaña, insectos o pájaro, todo para el era un mundo mágico tan maravilloso que pensaba que estaba soñando un bello sueño del cual no quería despertar.
Pero la vida no es un sueño es una dura realidad y así caminando en este mundo comprobó que la vista es una de las cosas que jamás teníamos que perder.
Creencia o fe marcada por las enseñanzas de los demás, padre nuestro rezado una y otra vez sin punto de referencia, amor hacia un dios muy diferente a los que tuviste la suerte de verlo. Un dios que muchas veces quería ver sin lograrlo porque el que yo veía en mi interior era muy diferente al que ustedes veíais, ese dios que me mando a la tierra sin poder disfrutar de todas las maravillas que el creo que me compenso con el oído y el olfato. El primero se desarrollo tanto que podía escuchar los suspiros y el corazón de los que me rodeaban comprobando muchas veces que eran mas ciegos que yo y que sufrían mas. El olfato lo tenia tan desarrollado que podía prever cuando llovería y percibir a través de los poros la soledad que hay en los seres humanos. Te agradezco que me prestaras tus ojos pero viendo como esta el mundo te los devuelvo prefiero vivir mi mundo interior.
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