domingo, 24 de abril de 2011

MIS PENSAMIENTOS


No soy quién para afirmar la verdad, la que Dios quiere que sepamos, pero Dios, en su gran amor nos da pistas que en cierto momento nos harán chocar con lo que tanto buscamos: La verdad que le es agradable. En mi gran búsqueda y después de tantos años, he considerado las condiciones a las que son sometidas las personas cuando llegamos al mundo, y lo que más nos conviene hacer. Creo que podré intuir sobre lo que Dios ha querido siempre, sobre lo que quiere que hagamos.

Dios ha dado por medio de sus profetas gran cantidad de mensajes, a miedo de que uno de ellos se haya equivocado apliquemos la gran prueba que nos dio el maestro Jesús, el dijo “por sus frutos lo conoceréis” creo que tal frase es aplicable tanto a seres como a hechos, así que, ¿qué es lo que da frutos agradable a Dios?, haber, siendo nosotros hijos de Dios somos semejantes a él, pero debemos aceptarnos primero como sus hijos para poder se semejantes. Jesús también dijo “bueno es sólo Dios”. Para ser bueno he pensado que hay dos únicos caminos muy sencillos, amar a Dios sobre todas las cosas y amar al prójimo como a ti mismo, estos dos valores y muchos más no están en el rezo, como tampoco en el exterior, están en nuestro interior.

Cuando se ama a Dios, se ama a un padre y cuando se ama a un padre, más aún cuando es bueno se hace lo que él quiere que hagamos, y con que seamos como él llenos de perfección, y así entran las virtudes ya mencionadas. Respecto al otro principio, veamos que en la vida todo sería perfecto si tratásemos al hermano como quisiéramos ser tratados. Cuántos de nosotros no se han visto en situaciones reprochables en las que uno dice, nunca tenía que haber hablado tan duramente, y tan fallo de respeto a estos hermanos. Pero veamos que esto tiene dos causas, o una de dos: La primera es el desconocimiento de Dios, y la segunda es un motivo de venganza por haber sido tratado así, rectificando y pidiendo perdón y así llegar como un ser agradable al padre. Quien haya despertado un poco de conciencia sabrá de antemano que no se han de cuestionar esas causas que te llevan a actuar erróneamente, y juzgar a los demás de una manera equivocada.

En el desconocimiento de Dios, los hombres suelen reaccionar como ya se dijo, de manera igual que como fueron ofendidos, esto ocurre en si porque el odio les ciega tanto que es lo único que son capaces de ver.

No hay comentarios: